La Miel y sus beneficios

La Miel y sus beneficios

Durante mucho tiempo se ha utilizado la miel para ayudar a mejorar los síntomas de los resfriados y la tos, para curar heridas y para mejorar nuestra respuesta inmunitaria a diferentes enfermedades, pero esas propiedades que se le dan a la Miel son ciertas o es solo una creencia popular. Voy a intentar de clarificar esas dudas sobre la Miel y sus beneficios en nuestra salud.

¿Cómo se obtiene la Miel?

La Miel es una sustancia natural, viscosa, con un olor aromático y con sabor dulce producida por las abejas a partir del néctar de las flores o de las secreciones de las partes vivas de algunas plantas, que las abejas transforman agregando sustancias específicas propias y después la dejan en las colmenas para que se deshidrate y madure.

Como alimento natural la Miel y sus beneficios se deben de estudiar desde un enfoque nutricional teniendo en cuenta los estudios científicos sobre los beneficios que pueda tener en nuestra salud.

Variedades de Miel

La Miel puede variar en su sabor, olor, textura y color dependiendo de las flores o plantas que las abejas hayan utilizado para succionar el néctar de las flores o las secreciones de las partes vivas de algunas plantas.

En el comercio podemos encontrar diferentes denominaciones de la Miel:

Con respecto a su procedencia:

Miel de flores o Miel de néctar: esta Miel la producen las abejas con el néctar de las flores. Puede ser producida con una única flor (monofloral) o con una variedad de flores (multifloral o milflores). La Miel monofloral suele ser de muchas variedades, como del castaño, azahar, cilantro, eucalipto, acacia, aguacate, encina, brezo, naranjo, tomillo, cantueso, romero, madroño, retama, lavanda, zarzamora…

Miel de mielada o mielato, rocío de Miel, Miel de rocío o Miel de bosque: es la Miel que producen las abejas a partir de las secreciones de las partes vivas de algunas plantas.

Según su elaboración, presentación o uso:

Miel en panal: es la Miel depositada por las abejas en los alvéolos operculados de panales recientemente construidos por ellas, o en finas hojas de cera en forma de panal realizadas únicamente con cera de abeja, sin larvas y vendida en panales, enteros o no.

Miel con trozos de panal o panal cortado en Miel: es la Miel que contiene uno o más trozos de Miel en panal.

Miel escurrida: es la Miel que se obtiene mediante el escurrido de los panales desoperculados (sin el opérculo de cera que cubre las celdas), sin larvas.

Miel centrifugada: es la Miel que se obtiene mediante la centrifugación de los panales desoperculados, sin larvas. La centrifugación hace girar los paneles a gran velocidad para que se desprenda la Miel de las celdas.

Miel prensada: es la Miel obtenida mediante la compresión de los panales, sin larvas, con o sin aplicación de calor moderado, de hasta un máximo de 45 ºC.

Miel filtrada: es la Miel que se obtiene eliminando la materia orgánica o inorgánica ajena a la Miel de manera tal que se genere una importante eliminación de polen.

Miel para uso industrial: para usos industriales o para elaborar como ingrediente otros productos alimenticios.

Miel con calidad diferenciada

Los Alimentos de Calidad Diferenciada son los que garantizan el cumplimiento de unos requisitos superiores de calidad y, por ello,  están protegidos por una normativa de la Unión Europea.

Existen dos reconocimientos para la Miel:

La Miel con Denominación de Origen Protegida (DOP) es la que su calidad o características se deben al medio geográfico con sus factores naturales y humanos, y cuya producción, transformación y elaboración se realizan siempre en esa zona geográfica delimitada de la que toman el nombre.

La Miel con Indicación Geográfica Protegida (IGP) es la que posee alguna cualidad determinada o reputación u otra característica que pueda atribuirse a un origen geográfico y cuya producción, transformación o elaboración se realiza en la zona geográfica delimitada de la que toma su nombre.

En España actualmente existen las siguientes Denominaciones de Origen Protegidas (DOP) e Indicaciones Geográfica Protegida (IGP):

DOP Miel de Granada: las principales comarcas productoras son Sierra Nevada-Alpujarra, Valle de Lecrín, La Costa, los Montes Orientales, la Vega y Zona Norte. En Granada existen una gran variedad de mieles monoflorales: castaño, romero, tomillo, naranjo o azahar, aguacate y cantueso, y mieles multiflorales como la Miel de la sierra y la Miel mil flores.

DOP Miel de La Alcarria: en la comarca natural de La Alcarria en las provincias de Guadalajara y Cuenca. La Miel de La Alcarria se clasifica en tres tipos: Miel monofloral de romero, Miel monofloral de espliego y Miel multifloral (romero, tomillo, satureja montana, espliego).

DOP Miel de Liébana: abarca todos los términos municipales de la comarca de Liébana, perteneciente a la Comunidad Autónoma de Cantabria: Cabezón de Liébana, Camaleño, Cillorigo de Liébana, Pesaguero, Potes, Tresviso y Vega de Liébana. La Miel de Liébana se clasifica en dos tipos: Miel monofloral de brezo y Miel de mielada.

DOP Miel de Tenerife: recoge una gran variedades de mieles monoflorales: Miel de Retama del Teide, Miel de Tajinaste, Miel de Aguacate, Miel de Castaño, Miel de Brezal, Miel de Relinchón, Miel de Barrilla, Miel de Hinojo, Miel de Poleo, Miel de Agave (Pitera), Miel de Malpica, Miel de Tedera, así como Miel de Mielada.

DOP Miel de Villuercas-Ibores: al sureste de la provincia de Cáceres, ocupando las comarcas de Las Villuercas, y Los Ibores. Producen Miel monofloral (retama y castaño), Miel multifloral y Miel de Mielada.

IGP Miel de Galicia: la mayoría de la Miel gallega es multifloral, aunque también se produce Miel monofloral (eucalipto, castaño, brezo y zarzamora) y Miel mielada.

Valores nutricionales de la Miel

Los valores nutricionales de la Miel varían según su denominación. En esta tabla se expone los valores nutricionales según la base de datos española de composición de alimentos (BEDCA).

Por cada 100 g de porción comestible
Energía 315 kcal
Hidratos de carbono 76,8 g
Proteínas 0,5 g
Lípidos 0 g
Fibra 0 g
Agua 17 g
Vitamina A 0 ug
Vitamina B1 (tiamina) 0,01 mg
Vitamina B2 (riboflavina) 0,05 mg
Vitamina B3 (niacina) 0,2 mg
Vitamina B6 (piridoxina) 0,3 mg
Vitamina B9 (folacina) 5 ug
Vitamina B12 0 ug
Vitamina C (ácido ascórbico) 2 mg
Vitamina D 0 ug
Vitamina E 0 mg
Calcio 15 mg
Hierro 0,7 mg
Potasio 54 mg
Magnesio 5 mg
Sodio 23 mg
Fósforo 17 mg
Selenio 0,5 ug
Yodo 5 ug
Zinc 0,3 mg

Como podemos observar, la Miel se compone mayoritariamente de hidratos de carbono y sin aporte de grasa; por tanto, es un alimento energético de gran calidad. Es un alimento muy indicado para los atletas.

Etiquetado comercial de la Miel

El etiquetado comercial de la Miel se rige por directivas y reglamentos europeos y en España por el REAL DECRETO 1049/2003, de 1 de agosto, por el que se aprueba la Norma de calidad relativa a la Miel.

Es obligatorio que en la etiqueta se indique:

  • El término “Miel”.
  • En los casos de Miel filtrada, Miel en panal y Miel con trozos de panal o panal cortado en Miel tienen que aparecer esas denominaciones en el etiquetado. Cuando la Miel es para uso industrial tiene que aparecer en el etiquetado la expresión “únicamente para cocinar” al lado del termino Miel.
  • El país origen de la Miel. Cuando la Miel se haya elaborado con mieles recolectadas en varios países se tiene que indicar en el etiquetado la lista de los países de origen.
  • La indicación del Peso neto (cantidad de Miel dentro del envase).
  • La fecha de duración mínima (“Consumir preferentemente antes del…”).
  • Las condiciones especiales de conservación y de utilización.
  • La Identificación de la empresa: tiene que aparecer en la etiqueta el nombre, la razón social o la denominación del fabricante o el envasador o de un vendedor establecido dentro de la Unión Europea y, en todo caso, su domicilio.
  • El lote.

Es opcional, aunque recomendable, que en la etiqueta se indique:

  • La información nutricional.
  • El origen floral o vegetal de la Miel, salvo en la Miel filtrada y en la Miel para uso industrial.
  • El origen regional, territorial o topográfico, si la Miel procede enteramente del origen indicado.
  • Las marcas de calidad diferenciada: Denominación de Origen Protegida (DOP) e Indicación Geográfica Protegida (IGP).

Beneficios de la Miel en la salud

La Base de datos integral de medicamentos naturales, uno de los recursos disponibles más completos y confiables de medicina natural, clasifica la eficacia, basada en evidencia científica, de acuerdo a la siguiente escala: Eficaz, Probablemente eficaz, Posiblemente eficaz, Posiblemente ineficaz, Probablemente ineficaz, Ineficaz e Insuficiente evidencia para hacer una determinación. En el caso de la Miel y sus beneficios la clasificación es la siguiente:

Posiblemente eficaz para:

Quemaduras. La aplicación de preparados de Miel directamente sobre las quemaduras parece mejorar la cicatrización.

Tos. Tomar una pequeña cantidad de Miel por vía oral a la hora de acostarse parece reducir los ataques de tos en los niños de 2 años en adelante. Pero no está claro si la Miel reduce la tos en los adultos.

Llagas en los pies en personas con diabetes. La aplicación de apósitos que contienen Miel a las úlceras del pie diabético parece reducir el tiempo de curación y evitar la necesidad de antibióticos.

Ojo seco. Usar gotas oftálmicas de Miel específicas o gel para los ojos ayuda a aliviar los síntomas del ojo seco.

Herpes labial. La aplicación de Miel en el herpes labial parece mejorar el tiempo de curación.

Llagas y úlceras en la boca y encías causadas por el virus del herpes (gingivoestomatitis herpética). Enjuagarse la boca y luego tragar la Miel lentamente ayuda a que estas llagas y úlceras sanen más rápido en los niños que están tomando un medicamento llamado aciclovir.

Inflamación y llagas dentro de la boca (mucositis oral). Enjuagar la boca y luego tragar Miel lentamente antes y después de las sesiones de quimioterapia o radioterapia parece reducir el riesgo de desarrollar llagas en la boca.

Enrojecimiento en la cara (rosácea). La aplicación de un producto de Miel tópico sobre la piel podría mejorar los síntomas de la rosácea.

Cicatrización de las heridas. La aplicación de preparados de Miel directamente sobre las heridas o el uso de apósitos que contienen Miel parece mejorar la cicatrización. La Miel parece reducir los olores y el pus, ayudar a limpiar la herida, reducir la infección, reducir el dolor y disminuir el tiempo de curación.

Posiblemente ineficaz para:

Acné. Aplicar Miel sobre la piel no sirve para tratar el acné.

Altos niveles de colesterol. Tomar Miel no parece reducir en las personas los niveles de colesterol.

Inflamación de la cavidad nasal y los senos nasales (rinosinusitis). Usar Miel en un aerosol nasal no mejora en las personas los síntomas de infecciones frecuentes de los senos nasales.

Existen creencias populares de que la Miel tiene otros beneficios para la salud, como: favorecer el tránsito intestinal, ayudar a mejorar el insomnio, controlar el estrés, fortalecer el sistema inmunológico, mejorar los síntomas de la artritis, mejorar la memoria… Pero no hay suficiente información confiable ni existen investigaciones científicas al respecto.

Precauciones con el consumo de la Miel

La Miel no es segura en niños menores de un año por el peligro de intoxicación por Botulismo (la causa es una bacteria que prolifera dentro del tubo gastrointestinal de un bebé y puede ser mortal).

La Miel por su alto contenido en glucosa debe de controlarse como alimento en personas diabéticas.

Las personas con alergia al polen deben evitar consumir Miel por posibles reacciones alérgicas.

La Miel puede retardar la coagulación de la sangre. La ingesta de Miel junto con medicamentos anticoagulantes o antiplaquetarios podría aumentar el riesgo de hematomas y sangrado.

¿Cómo conservar la Miel?

Lo mejor para mantener todas las propiedades de la Miel es conservarla en un envase de vidrio bien cerrado a temperatura ambiente, entre 18 y 27 ºC, y apartada de la luz solar y la humedad.

¿La Miel caduca?

La Miel no caduca. Tiene una fecha de consumo preferente tras la cual no se aconseja tomarla porque pierde sus propiedades, aunque su consumo no suponga un riesgo para la salud. La fecha en la que empieza a perder sus propiedades es normalmente a partir de 2 años desde su recolección. Hay que tener en cuenta que si las condiciones de conservación no son nada adecuadas puede ser que la miel caduque y su consumo sea un riesgo para la salud, aunque lo normal es que se estropee pero rara vez llega a caducarse.

 


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